El sitio "INFOBAE" registró la protesta de los vecinos de Caballito que están sin luz hace varios días. Como consecuencia los mismos cortaron la calle en el cruce de Campichuelo y Díaz Vélez y hubo algunos "cacerolazos" aislados. Según otros datos más de 20 mil hogares están sin luz en Capital y Gran Buenos Aires.
SEÑALA LA INFORMACION: Cansados de una situación que comenzó el 29 de diciembre, un grupo de vecinos del barrio porteño de Caballito se congregaron en la intersección de las calle Campichuelo y la avenida Díaz Vélez para reclamar por la falta de luz.
Decenas de personas se reunieron aproximadamente a las 18 para elevar la protesta por el apagón. Con cacerolas y utilizando bolsas de basura, cortaron parcialmente el tránsito en Campichuelo al 700. En medio de la incertidumbre sobre cuándo se retomará el servicio con normalidad, los propietarios e inquilinos de la zona no tienen información acerca de los motivos del corte y piden una explicación a la empresa Edesur.
Enojados por la escasez de respuestas y por no observar cuadrillas trabajando en las cercanías, según manifiestan, el enfado se incrementa por haber pasado la celebración de fin de año a oscuras y en medio de las elevadas temperaturas en los últimos días.
Desde Edesur explicaron a Infobae que hay cuadrillas trabajando en Campichuelo al 560 y que esperan "normalizar el servicio a la una de la mañana".
Según la última actualización del ENRE, en total hay 13.202 usuarios sin luz entre Edesur y Edenor. Los barrios afectados son Montserrat, Barracas, Almirante Brown, Avellaneda, Berazategui, Constitución, Flores, Floresta, Mataderos, Liniers, Almagro, Nueva Pompeya, Villa Lugano, Villa Soldati, Esteban Echeverría, Florencio Varela, Lanús, Quilmes, entre otros.
El 29 de diciembre, en vísperas de Año Nuevo, hubo casi 40 mil usuarios que se quedaron sin luz en Capital Federal y el Gran Buenos Aires por las altas temperaturas, que llegaron a los 38 grados. La gran mayoría se recuperó esa misma noche o el 30 a la mañana, pero hubo otros, como en Caballito, que siguen reclamando un problema que no mejoró a pesar del aumento de las tarifas. ¿No es este un claro síntoma de una sociedad en manos de la inoperancia?
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